Todos tenemos una película favorita: Una que hemos visto cientos de veces, que nos sabemos cada frase, cada plano de memoria... Una película que nos impactó la primera vez que la vimos, pero que nos vuelve a emocionar cada vez que la volvemos a poner frente a nuestros ojos. Esa que sabemos que nunca nos cansaremos de ver una y otra vez, como si se tratase de una canción.
A lo largo de este año hemos ido repasando una a una las películas de la saga para llegar hasta aquí, en el día que se cumplen 30 años de su estreno, a la posiblemente mejor película de terror de la mejor década para el género. Amigos, si Gosthface, el asesino de la saga Scream, me hiciera su famosa pregunta de "¿Cuál es tu película de terror favorita?" Yo no dudaría ni un segundo la respuesta: Pesadilla en Elm Street (Wes Craven, 1984).
De forma inesperada aparecen películas o personajes que cambian la cultura popular y la forma de ver las cosas. Hay un antes y un después del Drácula de Bram Stoker en 1897, del cine de zombies de George A. Romero, y si, hay un antes y un después de Freddy Krueger.
¿Enserio alguien no sabe quién es? estamos hablando posiblemente del psichokiller definitivo, llegó para revolucionar el slasher dándole al subgénero el toque de originalidad que pedía gritos y ha resultado ser una auténtico icono.
A New Line Cinema se la conoce como "la casa que construyó Freddy Krueger", porque esta película que costó 4 duros fue un auténtico fenómeno y salvó a la productora de la ruina. Se ha hecho una saga de 7 películas sobre ella, videojuegos, comics, muñecos... y hasta una serie de TV. Esto es histórico, parece un superhéroe de Marvel, pero no, es un asesino de cine de terror.
Pero es que Fred Krueger no es flor de un día, como Frankestein, es la suma de muchas piezas. Para crearle, Wes Craven se basó en un mendigo que deambulaba por su barrio y que se le quedó mirando fijamente cuando sólo era un niño... Una escena que le traumatizó, su nombre es el mismo que el del chico que le hacía la vida imposible en el colegio, su jersey es el resultado de juntar supuestamente los colores que peor relaciona el ojo humano, el rojo y el verde... Y su poder de atacar en los sueños, y base de la película, viene de una noticia que leyó de unos chicos que murieron mientras dormían... Pero seguro que si estáis leyendo esto, sois fans de Freddy y ya lo sabíais incluso en más profundidad.
El resto del carisma del personaje ya es cosa del gran Robert Englund, que le dio su forma de moverse y su personalidad, sin él, Freddy sería otra cosa. Para mí su importancia como actor en el cine de terror es equiparable a la de Boris Karloff o Bela Lugosi.
El guión además de original es impecable, desde la forma en la que está construido hasta los personajes: Como la atormentada Tina, que parece al principio la protagonista para luego morir (Wes Craven se marca un Psicosis), y la gran Nancy Thomson: Un personaje nacido para romper todos los esquemas de la víctima desvalida, una guerrera que se enfrenta a sus miedos, que viaja a lo más profundo de sus pesadillas para vencer al hombre del saco de una forma casi de cuento de hadas... Que puedo decir, yo estoy enamorado de Heather Langenkamp, una Sarah Connor o Ellen Ripley de primera generación.
"1, 2, Freddy's coming for you" |
Es una película perfecta, impresionante... La escena de Tina me sigue impactando incluso hoy en día, y me sigue pareciendo la mejor muerte que jamás he visto en una película de terror (y eso que la censuraron), ni siquiera en su nefasto remake la han podido superar. La muerte de Glen (Johnny Deep saliendo del cascarón), la bañera, la canción de Freddy (en versión original por supuesto)... ¡Todo!
Al margen de que sea mi favorita, considero a Pesadilla en Elm Street la película de terror más completa que jamás se ha hecho. Pensad en ella fríamente, lo tiene absolutamente todo: Una historia escalofriante marcada por una tragedia sucedida en el pasado, magníficos personajes, tiene suspense, escenas escalofriantes, gore, sustos, buenos efectos especiales, una banda sonora que pone los pelos de punta y el villano más carismático y terrorífico posible.
Wes Craven jamás ha estado tan inspirado, esta es su magnum opus, una película de terror imprescindible, imperdible en todos los sentidos, un clásico con todas las letras. La he visto como 100 veces y la volveré a ver 100 veces más. ¡Feliz Cumpleaños Freddy!